Anales de la RANM

302 A N A L E S R A N M R E V I S T A F U N D A D A E N 1 8 7 9 VALORACIÓN RADIOLÓGICA DE LAS SECUELAS PULMONARES EN LA COVID-19 Carlos F. Muñoz-Núñez An RANM · Año 2020 · número 137 (03) · páginas 298 a 304 previo. La enfermedad pulmonar intersticial como secuela de neumonía puede detectarse y valorarse inicialmente con radiografía de tórax, aunque es la TC la técnica de elección al permitir la detección precoz de fibrosis pulmonar, valorar su distri- bución y su extensión. La fibrosis pulmonar es la secuela crónica más temida y presenta los siguientes criterios diagnósticos con TC: • patrón reticular por engrosamiento del inters- ticio intralobulillar; • patrón en vidrio deslustrado irreversible; • distorsión mantenida de la arquitectura pulmonar; • patrón en panal persistente; • bronquiectasias y bronquiolectasias por tracción; • desplazamiento de cisuras por pérdida de volumen pulmonar; y • agrupamiento bronquial. Es importante reconocer que un control demasiado precoz con TC puede mostrar cambios transito- rios de neumonía organizada con distorsión de la arquitectura pulmonar, bronquiectasias y bronquio- lectasias por tracción (14). Estos cambios pueden etiquetarse erróneamente de fibrosis pulmonar cuando suelen ser reversibles, por lo que solo su persistencia indicará fibrosis. La observación de focos pulmonares de densidad vidrio deslustrado sin otros hallazgos de fibrosis puede deberse a focos inflamatorios persistentes potencialmente reversibles. La persistencia de síntomas, altera- ción de las pruebas de función respiratoria y los hallazgos radiológicos determinarán los pasos a seguir (17). Dada la trombofilia y el encamamiento prolongado de pacientes COVID-19, el riesgo de desarrollar trombosis in situ y enfermedad tromboembólica pulmonar es alto. Un reciente metaanálisis reporta una incidencia acumulada del 15% en pacientes ingresados en el hospital y de hasta un 23% en los ingresados en UCI (18). A largo plazo, la principal complicación es la enfermedad tromboembólica crónica, con o sin hipertensión pulmonar. Aunque en pacientes COVID-19 se desconoce su incidencia, hasta un 3% de pacientes que han sobrevivido a una tromboembolia pulmonar aguda desarrollan hipertensión pulmonar por enfermedad tromboem- bólica crónica (19). Los hallazgos principales de la enfermedad pulmonar tromboembólica crónica en el ATCAP son: • signos directos en las arterias pulmonares: obstrucción completa o parcial, trombo excéntrico, trombo calcificado, membranas, bandas y dilatación postestenótica; • signos de hipertensión pulmonar : dilatación del tronco de la arteria pulmonar, calcifica- ción de su pared, vasos tortuosos, dilatación del ventrículo derecho e hipertrofia miocár- dica; • signos de derivación del flujo con dilatación de arterias colaterales sistémicas; y • signos en el parénquima pulmonar: cicatrices, perfusión en mosaico, opacidades focales en vidrio deslustrado y alteraciones bronquiales. La hipertensión pulmonar puede ser secundaria a trombosis in situ y enfermedad tromboembó- lica pulmonar crónica (hipertensión grupo 4), a enfermedad intersticial pulmonar y/o hipoxia (hipertensión grupo 3), o al daño de los pequeños vasos arteriales (hipertensión grupo 1) (20) . El informe estructurado estandarizado para el diagnóstico y el seguimiento de pacientes COVID-19 facilita la estandarización de su lectura radiológica, la comunicación entre profesionales sanitarios y la recogida de datos que permiten construir modelos clínicos predic- tores de padecer la enfermedad y de estimar sus consecuencias (11). En las radiografías de tórax, nuestra propuesta de informe estructurado especifica el grado de afecta- ción pulmonar actual y su variación en el tiempo, clasificándose los casos como enfermedad pulmonar resuelta sin hallazgos, enfermedad pulmonar con mejoría significativa, enfermedad pulmonar estable y empeoramiento de la enfermedad pulmonar (Figura 3A). En la TC torácica el informe estructurado especi- fica la técnica de estudio, si se trata de una TC sin contraste o de una ATCAP. En el pulmón se describirán los hallazgos relacionados con la enfermedad pulmonar intersticial, su distri- bución, lóbulos afectos y su extensión en cada lóbulo. Se incluye también la aparición de otros hallazgos incidentales no relacionados directa- mente con la neumonía COVID-19 (p.ej. , enfermedad coronaria). En cuanto a la valoración de las arterias pulmonares, se determina el diámetro del tronco de la arteria pulmonar, la presencia o no de tromboembolia pulmonar y trombosis in situ , su distribución y su repercusión hemodinámica sobre el ventrículo derecho. Se concluye finalmente si la enfermedad pulmonar está resuelta, si ha mejorado de forma significa- tiva, si está estable, o si hay hallazgos de fibrosis pulmonar (Figura 3B). INFORME RADIOLÓGICO ESTRUCTURADO EN EL SEGUIMIENTO DE LA COVID-19

RkJQdWJsaXNoZXIy ODI4MTE=