Anales de la RANM

125 A N A L E S R A N M R E V I S T A F U N D A D A E N 1 8 7 9 INGENIERÍA TISULAR, UNIVERSIDAD Y SISTEMA DE SALUD Antonio Campos An RANM · Año 2019 · número 136 (02) · páginas 124 a 130 Tres son los retos que debe abordar la universidad en relación con la irrupción de la ingeniería tisular: un reto conceptual que permita su inserción en el contexto de la ciencia médica y la cultura de nues- tro tiempo, un reto investigador que haga posible su avance y su progreso y, finalmente, un reto docente que permita a los alumnos adquirir los conocimien- tos, habilidades y destrezas necesarias en dicha mate- ria para poder abordar conceptual y profesionalmen- te las numerosas demandas que en este ámbito han comenzado a generarse. Reto conceptual y cultural En el Departamento de Histología de la Universidad de Granada se asume a finales de los años noventa del pasado siglo el reto conceptual y cultural de in- cardinar la ingeniería tisular, generadora de tejidos artificiales, en el contexto de la ciencia histológica y en el contexto general de la ciencia médica y del resto de las ciencias de la salud. La primera aportación in- novadora en esta orientación por parte del Departa- mento se produjo en el X congreso Nacional de His- tología de Alicante celebrado en 1999 y dos años más tarde se explicitó en un capítulo del libro “Nuevos retos de la Docencia y la investigación en la Histo- logía”, publicado en México en 2001 y editado por la Sociedad Mexicana de Histología (8). Con poste- rioridad el desarrollo conceptual tanto en su orien- tación básica como terapéutica se abordó en sendos discursos impartidos por el Profesor Antonio Cam- pos, catedrático de histología de la Universidad de Granada: el discurso de Ingreso en la Real Acade- mia Nacional de Medicina, en 2004, titulado “Cuerpo Histología y Medicina. De la descripción microscó- pica a la Ingeniería tisular” (9) y el Discurso de aper- tura de la Universidad de Granada, en 2013, titulado “La célula y el tejido como medicamento. De la mé- dula ósea al Sistema Nervioso” (10). Más reciente- mente la aportación conceptual que incardina la in- geniería tisular en la ciencia histológica y a su través en la ciencia médica se ha completado con la defensa de una tesis doctoral (11) y la publicación de dos ar- tículos de investigación bibliométrica en 2018 y 2019 en la revista Tissue Engineering (3, 12) La aportación conceptual básica que permite inser- tar e incardinar la ingeniería tisular en el contexto cognitivo médico y universitario existente implica la aceptación de un cambio de paradigma para la cien- cia histológica. La histología desde su configuración como discipli- na en el siglo XIX, se ha ocupado y ocupa del cono- cimiento de las estructuras corporales en los niveles de organización microscópicos y en los distintos es- tados euplásico, proplásico y retroplásico para ofre- cer una aportación descriptiva y funcional que resul- ta decisiva para poder llevar a cabo el diagnostico microscópico de las lesiones (13) . La ingeniería ti- sular que se ocupa de la generación de tejidos arti- ficiales sustitutos de los tejidos nativos ha dado ori- gen a una nueva histología constructiva que, a su vez, conduce a una histología terapéutica y no solo a una histología diagnóstica (Fig. 1) . Por otra parte estos tejidos artificiales con función terapéutica, objeto de la nueva histología, se incardinan asimismo en el pa- radigma constructivo de la medicina para sustituir a las estructuras histológicas lesionadas a las que bus- ca reemplazar al igual que sucede, por ejemplo, con el corazón o el hígado a nivel anatómico o con los ge- nes a nivel molecular. Para analizar la evolución conceptual y cognitiva de la ingeniería tisular se realizó una investigación bi- bliométrica de la producción global de documentos científicos en la base de datos de la web of Science entre 1991 y 2016 y una investigación de la estructu- ra cognitiva de la ingeniería tisular mediante mapas con el programa SciMAT (3, 12). En el primer caso de los 41.588 documentos que recogen dicha deno- minación el 55.1% están relacionados con el ámbito de la tecnología y la ingeniería, el 27.26% con cien- cias de la vida y biomedicina y un 17.64% con las ciencias físicas. En la última década se incrementan progresivamente los trabajos en el ámbito de la bio- medicina más relacionados con las aplicaciones tera- péuticas que los propiamente vinculados con los mé- todos de fabricación. Durante el periodo analizado se observan variacio- nes entre distintos conceptos vinculados con la inge- niería tisular que pueden subdividirse en conceptos motores, emergentes, transversales o aislados. Sin em- bargo puede inferirse que en los tres vectores básicos de la ingeniería tisular -el celular, el de los biomateria- les y el de los factores de crecimiento- existe una evolu- ción muy definida (Fig.2 - página siguiente) que debe tenerse en cuenta a la hora de establecer la orienta- ción conceptual de la Ingeniería tisular de nuestro tiempo y su proyección en la investigación y la do- cencia universitaria. Reto investigador Resulta evidente que incorporar la ingeniería tisular en la Universidad implica asumir no solo el reto con- ceptual y cultural que ello supone, y hemos descrito en el apartado anterior, sino el reto investigador que asimismo lleva implícito. En este sentido el Depar- tamento de Histología de la UGR, de cuya experien- INGENIERÍA TISULAR Y UNIVERSIDAD Figura 1. Evolución del paradigma de la histología tras la aparición de la ingeniería tisular. Campos 2004

RkJQdWJsaXNoZXIy ODI4MTE=